En este World Ocean Day 2025 presentamos Sin Azul no hay Verde con un adelanto de lo que será la Travesía de Ramon Mirabet en 2026. Sin Azul no hay Verde es una iniciativa liderada por Ramon Mirabet y Old Surfer, la agencia de cambio dedicada a conectar la sostenibilidad con el consumidor. El proyecto nace con el objetivo de divulgar, concientizar y generar fondos para acciones destinadas a la protección del mar Mediterráneo y su biodiversidad. Sin azul no hay verde, muy pronto será una canción y hoy, ya es un llamado a la acción conjunta y abierto a la participación de todos.
TRAVESÍA
2026

Ramon Mirabet, Travesía 2026. Sin azul no hay verde.
EL PROYECTO
Sin azul no hay verde es el título y corazón del proyecto que lidera Ramon Mirabet para su travesía 2026, con escenarios y presentaciones en diversos puntos de las costas del Mediterráneo.
Sin Azul no hay Verde también será el título de la canción de difusión de su Travesía 2026, una iniciativa que nace con el objetivo de colaborar activamente con la protección del mar Mediterráneo, pues el 100% de lo recaudado por la canción será destinado a ONG’s y fundaciones que dediquen el 100% de sus esfuerzos en acciones por el cuidado del Mediterráneo. Desde hoy, Ramon nos invita junto con Observadores del Mar a sumarnos a la causa, y muy pronto al coro, porque si la causa es de todos el coro también lo será.
Próximamente iremos sumando y compartiendo los proyectos científicos de entidades y fundaciones y la participación empresas que irán sumándose al proyecto para que juntos, logremos hacer de esta causa un movimiento cada día más grande. Es por todo esto que, Sin Azul no hay Verde, es mucho más que la canción de una gira, es un movimiento, porque es música y no hay música sin movimiento.
Observadores del Mar, porque sin observación, no hay cambio.
Contar con el apoyo de Observadores del Mar significa formar parte de una red de ciencia ciudadana dedicada a la investigación y conservación del medio marino. Esta plataforma reúne a voluntarios y científicos para recopilar datos sobre la vida marina y el impacto del cambio climático. Gracias a esta colaboración, Ramon Mirabet y la Travesía 2026 Sin Azul no hay Verde, cuentan con el respaldo de una plataforma con más de 50 científicos y numerosos voluntarios, fundamentales para un uso más eficiente de los fondos recaudados por la canción Sin Azul no Hay Verde en su Travesía 2026 por la protección del Mediterráneo.


RAMON
MIRABET
Ramon Mirabet uno de los cantautores más carismáticos y reconocibles de la escena catalana, comenzó su carrera tocando en las calles y plazas de media Europa y en las costas del Mediterráneo. Su estilo único lo ha llevado de la improvisación callejera a llenar escenarios tan emblemáticos como el Palau de la Música Catalana de Barcelona o El Gran Teatre del Liceu. Cuenta con cinco discos de estudio y un sexto en camino, además de diferentes proyectos que verán la luz el próximo año 2026.
Hoy, Ramon inicia una nueva etapa artística y vital con «Sin Azul no Hay Verde», una canción que dará nombre a su próxima travesía musical en 2026. El proyecto nace del corazón del Mediterráneo, ese mismo mar que ha acompañado al artista desde sus inicios. Ramon Mirabet no solo canta al mar, sino que se compromete con él. Esta nueva travesía, desarrollada en colaboración con la plataforma científica Observadores del Mar, combinará conciertos a lo largo de la costa mediterránea con acciones de concienciación medioambiental. Cada puerto es una parada, cada concierto un llamado, cada nota un compromiso.
La iniciativa tiene una dimensión solidaria y transformadora: el 100% de lo recaudado por la canción Sin Azul no Hay Verde será donado a ONG y fundaciones que dedican todos sus recursos a la protección del mar y su biodiversidad.
Mirabet nos invita a embarcarnos en una experiencia única donde la música es brújula, el mar es hogar y la conciencia ecológica, el destino.
Sin Azul no Hay Verde es más que una canción: es un canto de amor y alerta, un viaje sonoro y visual que nos lleva por las costas del Mediterráneo en busca de una verdad sencilla pero urgente: sin mar, no hay vida.
No basta con cantar al mar: hay que escucharlo.
